El mundo es una proyección arquetípica de una realidad con más dimensiones.

Como la pantalla de tu ordenador, en la que se muestra una imágen interactiva de internet por la que puedes navegar e interaccionar en dos dimensiones.

Una imagen que es es fundamentalmente es luz e información. Información que se crea y re-crea instantaneamente en todo el mundo a través de millones de pantallas. Pero que que existe toda ella de forma simultánea en la red, disponible para quien la quiera acceder.

Nuestro cuerpo físico, lo que somos en 3D es un avatar para poder moverse por esta realidad que se reproduce y cobra significado en nuestras mentes.

Pero lo que llamamos realidad es un reflejo de luz e información de algo que trasciende lo que podemos percibir en nuestro estado habitual de conciencia.